Federico Müggenburg
El ya famoso discurso de Barack Obama en junio de 2009 en la
Universidad de El Cairo, puede ser considerado como el punto de evidencia de su
intromisión en los acontecimientos de las naciones musulmanas del norte de
Africa y de los otros países musulmanes que baña el mar Mediterráneo. En esta
forma, desde Marruecos, Túnez, Argelia, Libia, Egipto, Palestina, Jordania,
Siria y Turquía, están involucrados en unas sacudidas sociales, políticas,
económicas y sobre todo religiosas que parecen no tener solución. Además hay
que añadir los intereses geopolíticos de los países vecinos, próximos y
remotos, que se involucran en los significados de la constitución del Estado de
Israel y las nuevas configuraciones políticas que inventaron los signatarios
del Tratado de Versalles en 1919. Léase el Imperio Británico y el Imperio
Francés. El imperio Ruso acababa de ser destruido por el golpe revolucionario
de Lenin, por lo que no asistió a Versalles.
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