Federico Müggenburg
A la edad de 91 años, murió
en Tampico, Tamaulipas, Joaquín Hernández Galicia, paradigma del caciquismo
sindical mexicano. Ejemplo prototípico de la “revolución mexicana
institucionalizada”. Siendo de origen muy humilde acumuló una inmensa fortuna,
llegó poseer muchos ranchos, más de 30 edificios, sólo en Tampico, ganado,
propiedades en diversas ciudades del país, 130 tiendas diversas, una flota de
15 barcos pesqueros que abastecían más del 70% de la producción de camarón del
golfo de México, así como fábricas de los más diversos productos de consumo
popular. Basta con recordar que era dueño de balnearios, gasolineras,
funerarias y todo tipo de tiendas de materiales de construcción. Casi no hubo
rubro que no controlara en su región de influencia (la de producción y refinación
petrolera), quizá con excepción de la producción de pan de trigo y tortillas de
maíz, que se fundaron antes de su presencia sindical y pertenecen hasta la
fecha a grandes impulsores de la industria privada del país.
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Publicado en
www.cepos.org.mx el 25 noviembre 2013.
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